01 febrero 2008

Austenmanía

Este fue, de lejos, el regalo más friki (y me refiero por supuesto a la taza, no a las obras completas, que también fueron un regalo, pero de eso hace ya muchos años).
Si tuviera un piso más grande, en vez de una taza podrían haberme regalado una hamaca. Haberlas haylas. Y para el próximo cumpleaños, quizá me regalen 700 pingüinos. (700, no 365).

¿Qué haría yo sin una Laie en mi ciudad?

PS solo apta para austenitas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Oiga, pues a mí me encanta. Tenía una con títulos de clásicos hasta que, en una demostración de mi torpeza, me la cargué (y lloré la pérdida, vamos que si la lloré).

Yo pagaría encantado una con la portada de Emma, conste.

Irisibula dijo...

Oooh! Yo soy austenista de pro! La leí por primera vez en el instituto y la bibliotecaria luego me proporcionó Orgullo y prejuicio, Emma, Sentido y Sensibilidad y Persuasión. Me encantaría que alguien me regalara las novelas completas (:P). Por cierto también me encantan las tumbonas!

Rocío Flores dijo...

Hey, yo soy una auténtica austenista de lo peor, me encantan sus obras cursis y sobremanera divertidas.. Mira, si no te gusta la taza puedes enviármela ;-) Y a parte que debo presumirte, no hay nada mejor que leerte sus obras en el idioma original.. no se compara... Y te digo: estás en mi blogroll, me gusta leerte.
bye.

sfer dijo...

Eh... que pienso que el regalo es friki, pero a mí también me gusta! Me gusta tanto que me va a dar reparo utilizarla, así que ya tiene un hueco en una estantaría. Seguro que acabaré guardando cosas dentro...

Si quieren una, ya saben donde pueden ir a comprarla :P

Gracias por sus comentarios :-)

Irisibula dijo...

A que me compro una...