No me digan que no los recuerdan. Solo les excuso el catalán-castellano, y únicamente en el caso de que me lean desde fuera de Cataluña.
Estos no son los míos, que sabe dios dónde andarán (si es que todavía andan y no han pasado por alguna trituradora), sino que fueron rescatados de un contenedor de reciclaje. Sí, la imagen mental es correcta: sfer, inclinada sobre un montón de libros maltrechos y polvorientos, buscando un candidato a ninot para salvar de la quema. Ellos tuvieron suerte esta vez...
Como diría Calvin (o Hobbes), en todas partes hay tesoros...
5 comentarios:
¡Ufffff! Qué flashazo hacia la infancia. Por estos lares también deambularon los Iter Sopena, aún se encuentran, en ferias de libros viejos. De esas donde van los nostálgicos, disimulando o exhibiendo su memoria.
Siiiiiiiii, yo también lo tenía, venía con una funda de plástico, era pequeñito y amanoso.
El mío por detrás decía "Vale la pena tener un Sopena".
Vuelvo a mi 2º de EGB solo con contemplarlo.
que bo sfer, jo també el tenia i de català teniem l'Albertí, un de groc que crec que ara van reeditar.quins temps!
Jo encara el tinc a casa, tot i que pobret està una mica atrotinat de l'ús.
pues yo aun lo tengo, muy util para enriquecer vocabulario. me lo compro mi madre en el instituto.
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