Hay días en los que parece que la literatura, sin quererlo, me persigue.
Ayer mismo...
Por la mañana, encuentro con el tándem Ricardo Alcántara + Gusti en la librería Al·lots - Petit Príncep. Nos contaron muchas cosas de su último libro, El chamán de la tribu, y algunas de sus primeros libros (por ejemplo, lo difícil que les resultó que aceptaran el título del que iba a ser su primer libro juntos, Quién recoge las cacas del perro - adivinen ustedes qué palabra provocó reparos entre los editores). También nos hablaron de sus preocupaciones frente al mercado editorial (la rápida descatalogación de los fondos), de cómo ha cambiado su manera de enfrentarse al trabajo a lo largo de los años, de cómo se organizan el trabajo "en pareja"... de entre todo lo que nos dijeron, yo me quedo con el comentario de Ricardo de que "cada libro tiene su propia música"... Si así fuera con todos los escritores, cada libro debería traer, como mínimo anotado en el interior, cuál es la música que le corresponde. Quizá así se explicarían muchas cosas...
Por la tarde, encuentro con Odette Toulemonde y su escritor fetiche Balthasar Balsan. Ahora ya es un poco tarde para verla en el cine (suerte de algunos como yo, que tenemos a mano cines de reestreno como los Maldà), pero no se la pierdan cuando aparezca en DVD. De vez en cuando va bien recomendar algo que no sean libros, ¿verdad?
23 octubre 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Una mujer con un libro en las manos me atrae tanto.....
Publicar un comentario